El guitarrista y compositor de Manic Street Preachers, Richey Edwards, ha sido declarado muerto después de llevar 13 años desparecido, según ha anunciado el portavoz de la banda. “Ha habido un cambio en su estatus legal”, ha dicho el representante.
Edwards desapareció en febrero de 1995. Había abandonado el hotel londinense donde la banda esperaba salir rumbo a Estados Unidos, visitó su casa de Cardiff y dejó su carro cerca del puente Severn, en el límite entre Gales e Inglaterra, el lugar preferido por los suicidas de la zona. En su vehículo, se encontró su pasaporte, sus tarjetas de créditos, poemas y Prozac. Desde entonces no se ha vuelto a saber nada sobre el artista.
Según el abogado de la familia de Richey Edwards, el cambio de estatus legal supone “la aceptación de que sus asuntos han sido arreglados, que no es lo mismo que aceptar que ha muerto”.
Según las leyes británicas, una persona puede ser declarada oficialmente muerta siete años después de su desaparición. Sin embargo, los padres del músico han esperado seis años más para aceptar el trámite, indispensable para acceder a su patrimonio valorado en cerca de 500.000 euros.