Por Juan Carlos Ascanio
Por: Greta Álvarez – greta@oidossucios.com
El domingo 20 de abril fui al concierto de una de estas tantas bandas californianas de ska/punk: Rx Bandits. Es la segunda vez que los veo y ni me encantan. Igual, como aquí en Venezuela nunca vienen grupos realmente seductores, éste, aunque no era Dirty Pretty Things, tenía algo medio interesante.
La primera vez que los vi fue en este club súper moderno de Barcelona llamado Razzmatazz, ese día el chinito guitarrista / tecladista (sí, al parecer vende tener a un asiático en una banda) nos comentó a mi novio y a mí, luego del concierto, que tenían sueño y evidentemente esto se notó en el ánimo con que tocaron. Pero en esta segunda vez que los vi en el local Envivo de El Rosal, en un Show Matineé “para todas las edades”-como decía la entrada- comparando ambos conciertos, me di cuenta que en esta oportunidad estaban bastante despiertos, eso fue muy bueno, ayudó a que fuese un mejor show.
Como de costumbre en el país de la impuntualidad, el toque no empezó a las 3 p.m sino a las 7 p.m: aproximadamente 4 horas de diferencia, me esperaba más. El público presente en general eran punketos de +18 pero que a su vez eran post-adolescentes weird-, también prevalecía un look nü-raver en la mayoría de los asistentes todos con Nike Air Force One, casi parecía un concierto de Yelle.
Los teloneros. Arrancó el show Piso 23, que aunque no es el género musical de mi preferencia no tocan nada mal, son hasta chéveres. El resto fueron dos bandas de pre-pubertos “Take Control” y “Yo y los otros” aunque escuché una canción como máximo de cada una puedo afirmar que son latosos…punk de bachillerato de colegio privado desde la música hasta el look, boring hasta el cansancio. Sorry, guys.
Entre presentaciones de bandas, los hosts fueron Gerard Cortéz y Lizandro Melean, ambos editores de Urbe. Se montaron en tarima a promocionar el relanzamiento de su semanario y a presentar a las bandas. No faltaron los comentarios de mal gusto del montón de intratables seres del underground, llenos de resentimiento que los abucheaban y no dejaban hablar.
Ahora sí, Rx Bandits sonó mucho mejor que cuando los vi en España. Alargaban las canciones, las adornaban, tenían más potencia. Matthew Embree, el vocalista de la banda, entre sus palabras en español dijo que venir a esta parte del Tercer Mundo era un “sueño hecho realidad”. También afirmó “nosotros encantamos arepas y cachapas”que supongo fue lo que les llevaron a comer. Repitió en varias oportunidades no tener palabras para describir lo que sentía. Y el infaltable tema de que “ellos representaban a la gente de Estados Unidos y no a los políticos.” Predecible.
Algo anecdótico fue que en el tema “Only for the night” el vocalista hizo el coro en español. La canción “Infection” se la dedicaron a uno de los productores del evento.
El evento, apartando los asistentes, djs, y teloneros, estuvo bueno. Pero no me aguanto otro concierto de punk en Venezuela, ni en ningún sitio, por un buen tiempo.
[osp]3.5[/osp]