Por Juan Carlos Ascanio
De la noche a la mañana, así nada más, Nine Inch Nails lanzó completamente gratis a través de la Internet su nuevo álbum. The Slip transita el mismo camino musical de With Teeth (2005) y Year Zero (2007), una fusión hombre-máquina que da lugar a un sonido industrial muy orgánico, que además se ve tocado por el aura experimental de Ghosts I-IV (2008).
Después de una breve introducción, el tema “1,000,000” establece que este álbum es guitarrero y ruidoso. Y así se mantiene durante varios tracks, incluido el excelente tema “Letting you”, uno de los mejores que ha compuesto Trent Reznor en la última década, donde podemos reencontrarnos con el sonido potente y corrosivo del Nine Inch Nails de mediados de los 90.
Hacia la mitad del álbum “Echoplex” y “Head down” bajan la mecha pero mantienen la temperatura, especialmente el segundo, que se erige como uno de los mejores temas del álbum junto a “Letting you”. Mientras tanto, el último tercio del álbum corresponde a la partemás experimental, donde las experiencias de Ghosts vuelven a asomarse, esta vez en forma de temas ambient finamente acabados.
A Favor: The Slip logra reunir en una obra coherente las diversas direcciones musicales con las que Nine Inch Nails ha coqueteado en los últimos 3 años. La producción, a cargo de Atticus Ross, Alan Moulder y el propio Trent Reznor, es impecable y del más alto nivel. Y la gran sorpresa para los fans es el regreso de Robin Finck, quien se cansó de esperar por la democracia china y decidió volver a formar parte de una banda de verdad. ¿Qué más se puede pedir?
En Contra: El primer sencillo, “Discipline”, es innecesariamente similar a “Only” (With Teeth, 2005), lo cual huele a fórmula más que a estilo y las fórmulas son un concepto que no encaja con la libertad creativa que profesa Trent Reznor desde que se liberó de su contrato discográfico. De cualquier manera, tanto “Discipline” como “Only” son buenos temas, pero cuidado ahí.
Veredicto: The Slip dista de ser el mejor trabajo de Trent Reznor, pero es definitivamente un buen álbum y, sobre todo, una agradable sorpresa. Si así llueve, que no escampe.
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