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Aerosmith dio cátedra y cumplió con su show en Caracas

Fotos y reseña del concierto de Aerosmith en Caracas.

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Por Alejandro Fernandes Riera

Fotos: Jhon Scarso / SCARSO.NET

Cuando eres  una banda grande y con tantos años de trayectoria, tu deber es dar el tipo de shows como el de Aerosmith en Caracas la noche de ayer, para no perder relevancia y la gente siga hablando de ti. Según contaron, Tyler y compañía se molestaron un poco en la rueda de prensa ya que ningún periodista tuvo la decencia de preguntarles acerca del disco que venían a promocionar, Music from another dimension. Si sacas un disco bueno y nadie le para, esfuérzate para que tus shows den de qué hablar.

En lo personal no soy fanático de la banda, pero, he de reconocer que Aerosmith, a pesar de no ser un grupo que hace buenos discos, sí hacen buenos singles y para muestra, es que cuando tocaban chatarritas como “Crying”, “Sweet Emotion”, “Dream On”, “I Don´t Wanna Miss a Thing” o “Crazy”, estas eran coreadas a más no poder por los asistentes.

Pero vamos desde el principio: Del Pez, ganadores del Festival Nuevas Bandas 2013 recibió como premio abrirle a Aerosmith. La banda estaba bastante nerviosa, pero supieron aprovechar al máximo la oportunidad de tocar en El Poliedro (bueno, afuera) raramente, con un muy buen sonido (el típico problema con todos los opening act). A pesar de que les dieron 30 minutos, el cuarteto tocó poco más de 22, repartidos entre temas de su EP Acción es Carácter (“En Celo”, “Suiche”, “Escarabajo) y algunos que formarán parte de su disco debut como “Ermitaño Vals” y “Embaucador”, con la que abrieron el show.

A eso de las 8 PM comenzaron a alistar el escenario para recibir a la banda liderada por Steven Tyler y sus fieles escuderos Joe Perry, Brad Whitford, Joey Kramer y Tom Hamilton todos miembros originales de Aerosmith junto al tecladista Russ Irwin que dejó muy buena imagen gracias a su versatilidad con las teclas, buenas melodías y teclados bluesy, además de acompañar a Tyler en la mayoría de sus canciones.

La banda tocaba de fondo y tanto Perry como Tyler (ataviado como esa tía de 60 años que se rehúsa a aceptar que tiene 60 años) hicieron su aparición desde una pasarela que iba desde la tarima al centro de la zona preferencial. El show abrió con “Let the music do the talking”.

“Love in an elevator”, segunda canción de la noche, ya daba un vestigio de lo que sería el resto del show, siendo sucedido por clásicos como “Dude Looks Like a Lady”, “Cryin’”, “Crazy” y “la canción de Armageddon” que puso sentimental a mucha gente.

La banda supo elegir muy bien su setlist, ejecutado a perfección por una banda que parece incombustible a sus 43 años de longevidad en el mundo artístico. Los mejores momentos de la noche se lo lleva la interpretación de “Living on the edge”, “Walk this Way” (la versión buena, solo les faltó Run DMC) y el cover a “Come Together” de The Beatles impregnado por una guitarra más bluesera que la original.

El encoré sirvió para refrescarse y volver para cerrar, contundentemente, con “Dream On”, tocada por Tyler en un teclado ubicado al final de la pasarela que nombré al principio de la reseña. Joe Perry posteriormente se “encaramó” en el piano para solear. Cerraron con “Sweet Emotion” y un outro increíble lleno de solos y algo de psicodelia.

Si alguien dio cátedra esa noche fue Steven Tyler, uno de los mejores frontman que he visto, quien se mostró muy atento con el público y bailoteaba por toda la tarima. Tampoco son tres días haciendo conciertos. Su voz estuvo a la altura en casi todas las canciones, participó con Joey Kramer en la percusión, tocó su harmónica y habló mucho con el público.

De los momentos más graciosos fue cuando, a solo 4 canciones de haber empezado el show, estaba en la pasarela y le llegó un olor, probablemente a marihuana. Tras sentirlo, dijo con tono socarrón: “¿Por qué se drogan tan rápido? Porque yo sé lo que está pasando por acá” (“Why you get high so fast? ´cause I know what´s going on here”).

Vivimos en un país donde hay pocos conciertos de rock y todos sabemos por qué. Al final se aplaude que se haya hecho y aún más, que haya sido un show a la altura. Apartando su imagen kitsch, Aerosmith cumplió.

Setlist:

Acá puedes leer nuestro especial sobre la banda: Aerosmith en cuatro movimientos.

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