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Por: Mikel Barandiaran – @mikelaitor
“Ya oscureció, nunca es puntual pero pronto va a venir” es el verso que da inicio a “20.000 Leguas Cuadriláteras”, la segunda producción discográfica de la banda merideña Charliepapa. Ese Garage Rock tan simple pero que a la vez dice tanto, tema tras tema se percibe cómo esa onda rock/pop particular de la agrupación va llenando la habitación y te transporta, demostrando la buena vibra que una vez más logran conseguir.
El disco presenta algunos cambios en las canciones, unas composiciones más profundas, con un toque de Sabina en las letras y ritmos cada vez más sólidos. Esta agrupación ha crecido de una manera sorprendente desde su último trabajo “Quinta Giuliana” (2008), una evolución favorable donde han sabido acoplar el sonido de las guitarras altamente influenciadas por el blues y el jazz, con esos repiques en las percusiones que permiten de una manera ligera apreciar las letras que tanto tienen que decir.
El bajo ha tomado más fuerza en este segundo trabajo. En canciones como “Papas Maquetas” se pueden notar líneas del instrumento que llevan a creer en la improvisación ya que siempre parece nueva, “Siempre es lo mismo, pero nunca es igual”.
En este último material discográfico la madurez musical de la banda y la distribución de las canciones en el playlist ha permitido navegar con facilidad entre temas, sin dejar cambios bruscos en los que se caiga la atmósfera, alternando temas como “Borroso” y “Hamada del Draa” con otros más suaves y alternativos como “Vuelta en L” y la misma “Papas Maquetas”.
“Borroso” fue el primer single, un tema que ejerce la labor de puente imaginario entre ambos discos, ya que rescata mucho del estilo de “Tatuco” y “Galileo”, y se nota una gran empatía y comodidad en la voz de Mattia al cantarla. Una excelente manera de atrapar a los oídos e irlos acostumbrando a este sonido innovador, temas como “Carnaval” y “Vuelta en L” demuestran una vez más la capacidad lírica que tiene este cuarteto, letras que hacen reflexionar a través de metáforas y poesía que se fusionan en armonía con la leve distorsión y los redobles de batería que te llevan a vivir lo que la canción dicta.
Este material fue masterizado en los estudios Sonic Ranch, las mezclas estuvieron a cargo del ganador del Grammy, JustianLeah Gandro. Además contó con la participación de los productores, Carlos Imperatori y Camilo Froideval (Molotov, Eli Guerra, etc).
Actualmente el disco se encuentra en la página web de la banda, www.Charliepapa.com . Los cuatro de Mérida (Mattia, Félix, Osheye y Jonathan) siguen demostrando la convicción y profesionalismo que se necesita para salir adelante.
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