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Smashing Pumpkins y su dosis nostálgica noventosa

Fotos y reseña del show privado que ofreció Smashing Pumpkins en Caracas.

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Por William Padrón / @williampadron

Poca gente estaba al tanto de la venida de Smashing Pumpkins a nuestro país, a medida que se acercaban los días se fue propagando la visita y a dos días del show, fanáticos, curiosos, desconocidos y amantes de conciertos querían asistir.

Mención especial merece la marca escocesa Buchanan´s y su plataforma “Tiempo para Compartir” por esta iniciativa creada, en la que había que realizar horas de trabajo comunitario y de esa forma tener acceso a este show que se llevó a cabo en el CIEC de la Universidad Metropolitana para 2000 voluntarios la noche del 26 de Junio.

A pesar de la incompetencia profesional de la agencia de comunicaciones corporativas  y publicidad Stima, quienes a falta de palabra y claro desdén hacia OidosSucios para la cobertura del concierto, pudimos asistir gracias a la buena voluntad de la disquera de la banda, EMI Music en Venezuela.

Caras conocidas, jóvenes ansiosos por descubrir más de la banda, voluntariado agradecido. El recinto estaba decorado como un gigantesco bar en el que podías caminar tranquilamente mientras te servían un escocés y pasapalos. Todos contentos.

Del CIEC ya conocemos su problema de acústica. Con esta premisa en mente, psicológicamente uno estaba tratando de asimilar este detalle con optimismo. A las 10:30pm sale a escena Billy Corgan acompañado de su renovada banda. Mike Byrne (Batería), Nicole Fiorentino (Bajo) y Jeff Schroeder (Guitarra) tienen la responsabilidad de llevar el sonido de Smashing Pumpkins en tarima.

Abren con “Black Diamond”, un cover de Kiss en el que calientan motores y se ve el desenvolvimiento en primera instancia de la banda. La ex Veruca Salt, Nicole, se le ve segura. Vienen las comparaciones de Byrne con Chamberlain, ex baterista y fundador de Smashing Pumpkins. El jovencito hace muy bien su trabajo a pesar de que se extrañe al eximio Chamberlain. Jeff aún no destaca en la primera canción, su aceptable labor en las seis cuerdas se iba a comprobar en el transcurso del toque.  Es evidente que  todo gira en torno a Corgan  y su innegable habilidad en la guitarra.

Inmediatamente “Zero” aparece en el setlist junto a “Bullet With Butterfly Wings”, un claro momento nostálgico que nos remite a la última etapa memorable del Rock alternativo de los 90s. Billy Corgan se le siente feliz, sabe que la gente esperaba estas canciones, mira de vez en cuando a la multitud y mantiene el tono desgarrado de alguno de los versos y frases más impactantes de este par de temas.

“Today” iba a reafirmar que Smashing Pumpkins venía a hurgar en sus éxitos notables. Esta alineación es consistente, se entiende, le siguen el pulso a Mr. Billy. El sonido se apreciaba mejor si estabas cerca del stage, la banda de alguna forma hizo un gran esfuerzo para que sonara claro… de todas maneras si algo aprendimos de Smashing Pumpkins es que el ruido era parte de su naturaleza rockera, así que el público estaba disfrutando. Así tocan el b-side “Starla” con una precisión que se agradece.

Los seguidores de “Batman y Robin” se alegraron al escuchar en directo “The Beginning Is The End Is The Beginning”, tema que apareció en este film. Toda la química del cuarteto iba mejorando con cada canción. Corgan agradece a quienes asistieron y se le nota la emoción. Presenta la primera de sus nuevas canciones “Quasar” seguida de “Panopticon”. Y el éxtasis del público llega con “Tonight, Tonight”, se mantiene con la intrigante y dolorosa “Ava Adore”, para darle paso a otro track nuevo como “Oceania”.

En la misma onda complaciente llega “1979” sin que la adrenalina baje para avivarla con “Cherub Rock” y “Muzzle” que cierra el setlist de la noche. La banda se retira para que pidan otra.

Salen a interpretar el cover de David Bowie “Space Oddity” con una energía necesaria para dar el cierre adecuado con la desquiciada y potente “X.Y.U”. Una píldora de Rock alternativo que fue claramente aplaudida.

La banda se paseó entre los discos Siamese Dream (1993), Mellon Collie And The Infinite Sadness (1995), Adore(1998), Oceania (2012), un b-side, dos covers, cayendo la mayor carga sobre sus éxitos de los 90s con la intención de conectar con el público que lo ha extrañado.

Sería muy insensato menospreciar este nuevo Smashing Pumpkins, el éxito de sus temas está más allá de los cambios de alineación, canciones que perduran en el tiempo y su principal creador se mantiene tocándolas.  Billy Corgan es un genio musical capaz de crear melodías, armonías, distorsión, poesía y que entre sus altos y bajos, demuestra que sabe perfectamente lo que hace en tarima: procura dar un gran show de Rock cargado de decibeles.

Así fue como la nostalgia de un puñado de canciones del Rock contemporáneo sirvió de soundtrack para una noche en la que Smashing Pumpkins se reunió con una parte de sus seguidores quedando una deuda tácita de que deben volver a Venezuela, o al menos es la esperanza que queda, pero para todo público.

SETLIST:

Black Diamond (Original de Kiss)
Zero
Bullet With Butterfly Wings
Today
Starla
The Beginning Is the End Is the Beginning
Quasar
Panopticon
Tonight, Tonight
Ava Adore
Oceania
1979
Cherub Rock
Muzzle
Space Oddity (Original de David Bowie)
X.Y.U

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